Los fundadores de Xinca quisieron crear una empresa que pusiera por delante a las personas y al planeta, demostrando que es posible generar un negocio rentable y que al mismo tiempo marque una diferencia en el mundo.

En Xinca desarrollan productos con una menor carga ambiental que los productos tradicionales, generando un precio justo por un producto lleno de sentido social, atemporales y sin género.